Viene relevo en el Seneam
ALÁN LUNA, expiloto de la Fuerza Aérea Mexicana y candidato a sustituir a Víctor Hernández al frente de Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (Seneam), se cayó de la nube antes de aterrizar.
Del capitán Luna se pueden decir muchas cosas, pero la más importante es que él suele describirse como el “amigo del amigo” del señor Presidente. Y por ello, asegura, él es asesor en Palacio Nacional.
Por ello lo mandaron a supervisar lo que está haciendo Seneam para que el 21 de marzo próximo todo esté a punto para que los aeropuertos Felipe Ángeles y Benito Juárez logren coordinarse en el tránsito aéreo.
Pero no hay buenas noticias. Lo que se sabe es que en la administración del nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) hay mucha preocupación.
La incertidumbre estriba en que la segunda parte del rediseño del espacio aéreo, que incluye los procedimientos de alimentación al AIFA, no está terminado y tampoco colocado en las pantallas de los controladores.
Esto se debe a que no se tomó en cuenta que este es un trabajo especializado, que deben realizar los programadores/controladores en forma minuciosa y con cuidado, cosa que no ha ocurrido.
Lo anterior muy a pesar de que se han pagado millones de dólares en asesoría de NavBlue, que preside Fabrice Hamel, empresa filial de Airbus que avaló la operación simultánea de ambos aeropuertos.
Ahora los nuevos ‘expertos’ de la segunda parte del rediseño descalificaron a los franceses, pero no han logrado terminar el trabajo. Por ello la Defensa Nacional mandó a tres militares, que tampoco han logrado adelantar gran cosa.
No se ha resuelto cómo se va a proteger el área de los globos aerostáticos de Teotihuacán, ni las llegadas y salidas al aeródromo de Atizapán, donde operan varias escuelas de aviación y aviones privados.