Terremoto en Turquía: Equipo mexicano rescata a primera persona en Adiyaman
A Turquía viajaron 16 binomios caninos; entre los perritos rescatistas se encuentra Ecko, quien junto a Frida ayudó tras el sismo del 19 de septiembre del 2017 en México; así como Orly y Balam, ambos hijos del lomito Athos, envenenado.
El equipo de rescatistas enviado de México a Turquía ha rescatado a la primera persona en su jornada de labores, en la provincia de Adiyaman. Esto luego del terremoto magnitud 7.8 que sacudió a ese y otros países, como Siria.
“Hace unos momentos, rescataron a la primera persona con vida de los escombros, en Adiyaman, Turquía. ¡Apoyamos con esperanza siempre!”, dijo el canciller Marcelo Ebrard en sus redes sociales.
La misión de ayuda humanitaria enviada por México llegó el miércoles a Adana, Turquía. El equipo está integrado por personal del Ejército, Marina, la Cruz Roja y la Secretaría de Relaciones Exteriores.
También viajaron 16 binomios caninos. Entre los perritos rescatistas se encuentra Ecko, quien junto a Frida ayudó tras el sismo del 19 de septiembre del 2017 en México; así como Orly y Balam, ambos hijos del lomito Athos, quien también era rescatista y falleció junto a Tango luego de ser envenenados.
Frío acecha a Turquía y Siria tras el terremoto; cifra de muertos sube a 19,300
Turquía pasa ahora por el invierno, con temperaturas de hasta -2 grados centígrados.
El terremoto que arrasó con miles de edificios fue uno de los más mortíferos del mundo en más de una década. Las muertes han superado el número de víctimas del sismo de 2011 frente a Fukushima, Japón, que provocó un tsunami que mató a más de 18 mil 400 personas.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Turquía dijo que hasta el jueves por la tarde, 95 países han ofrecido ayuda y 6 mil 479 rescatistas de 56 países están trabajando en las áreas afectadas.
Los rescatistas continuaban su carrera por sacar a más personas con vida de entre los escombros, mientras se acababa el tiempo para encontrar sobrevivientes atrapados. Aunque las historias de rescates milagrosos alegraban brevemente el ánimo, la dura realidad de las penurias para decenas de miles de personas que habían sobrevivido al desastre arrojaban una sombra sobre los esfuerzos.