Angustia

Pues tras el Informe de AMLO queda claro que su visión de país no cambiará. Está totalmente fuera de la realidad y sin ninguna muestra de enmendar un desastre nacional. Ni pena, ni cuestionamientos de su actuar. La angustia se apodera de nuestro ánimo. La militarización es su credo. La sociedad civil no es significativa; son fifís. Y sólo él posee el poder para decidir nuestra suerte.

Bajo la bandera de primero los pobres, ha creado más pobreza, y tras amenazar a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación; sin importar el llamado de la Corte Interamericana, sobre la prisión preventiva oficiosa, con matices, condena a los pobres a más injusticias. La violación a los derechos humanos es clara, a la presunción de inocencia. Queda en los jueces decidir sobre un tema que las fiscalías recurren sin distinción. La utilizan muy frecuentemente como mañana política y no como elemento para prevenir incidencias en juicios en libertad. Pasan años y los juicios ni siquiera avanzan.

Las ayudas sociales son su esperanza. El presupuesto se usa para ampliarlas aunque a futuro sean insostenibles. A esos montos se añaden sus megaobras faraónicas e inservibles, que ni él utiliza, como el AIFA, y se destina gasto público a Pemex y CFE que no son eficientes, ni rentables. Se enfrentan posibles aranceles en T-MEC por violaciones a acuerdos y contratos, pero como su gobierno no los pagará, que sufra la canalla, es decir, los exportadores.

El gasto público no da para más. Ya se gastó el fondo de reserva, más de 300 mil millones, ya acabó con los fideicomisos y no le alcanza. Adjudica contratos sin licitación y el tufo de la corrupción está presente. Pero insiste en acabar con el INE y sus 24 mil millones que considera excesivos, frente a gastos de más de 85 mil millones en AIFA, más de 340 mil millones del Tren Maya, 18 mil millones de dólares en Dos Bocas. Más de 100 mil millones en 2023 a sus obras, no hay dinero que alcance con contratos discrecionales.

Pero acabar con la disidencia es su obsesión, no admite críticas. El sistema de salud en ruinas y sigue diciendo que es el mejor y pronto será como los sistemas nórdicos. Presume el AIFA, inútil y sin demanda, como uno de los mejores aeropuertos de Latinoamérica. La seguridad pública ya es un sueño. No existe. El crimen organizado ha tomado control de los territorios y persigue a los militares. Castiga a quienes no pagan derecho de piso. Su poder corruptor es insaciable. Y es inevitable sin una estrategia del Estado. La angustia vive en nuestros corazones.

¿Cómo entender que destruir la Policía Federal fue un capricho costoso? La Guardia Nacional está militarizada y pese a acuerdos y modificación constitucional, AMLO no respeta su carácter civil. Sus medidas para hacerla depender de la SEDENA son improcedentes. Busca alternativas. No hay más que cambio constitucional, imposible de lograr.

Aunque el bloque opositor y la moratoria constitucional se tambalean con la decisión unilateral del PRI de modificar un transitorio constitucional para resguardar a la Guardia Nacional más allá del cambio sexenal, tampoco la medida acaba con las intenciones de AMLO.

Puede ayudar la medida si finalmente no se destruye el bloque opositor y gana el 2024. El Congreso y el Ejecutivo tendrán margen de maniobra para reconstruir una policía civil. Sin embargo, a Marko Cortés no le gustó la forma, y se entiende. Aunque en una alianza hay un objetivo, las partes tienen su autonomía. Nada fácil conciliar posturas. Y nos vuelve la angustia al cuerpo.

Se acerca la celebración de las fiestas patrias. Además de las ocurrencias de los invitados de AMLO, se espera el mensaje sobre el futuro de la relación con EU y Canadá. Más angustias. Se registrará un discurso patriotero, provocador para el apoyo de sus seguidores y confrontados de los beneficios del libre comercio que no piensa abandonar solo abollar.

Así se cumplen cuatro años de angustia. Donde cada día pensamos que AMLO no puede causar más destrucción y nos sorprende con nuevas ocurrencias. Hasta el momento ha logrado estabilidad macroeconómica y superávit fiscal que han evitado devaluaciones. Pero crece deuda y el mal uso del gasto público erosiona nuestras instituciones, inservibles, faltas de recursos y contenidos. El país de un solo hombre.

Por eso la angustia nos paraliza, pero el miedo debe vencerse. Esperemos que la Alianza va por México resista. Que tras el 12 de septiembre avizoremos una única candidatura para el Edomex. El país está en juego. No podemos darnos el lujo de claudicar.

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