Positiva Sorpresa
Por Salvador Martínez García
En el pasado mes de agosto el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) presentó un muy positivo avance de prácticamente uno por ciento, para alcanzar una tasa anualizada de 4.7 por ciento mayor.
Este sorpresivo resultado es muy alentador pues el avance de agosto fue el mayor desde abril pasado, mientras la tasa anual fue la más alta desde julio de 2021.
Los mercados estimaban menores expectativas, lo que viene a dar un aliento a la confianza de los inversionistas nacionales e internacionales.
El crecimiento del IGAE fue de 0.97 por ciento en su tasa mensual, cuando no se esperaba crecimiento. El sector de actividades primarias tuvo, repunte del 3.6 por ciento; las terciarias aumentaron 1.2 por ciento y el sector industrial no tuvo alza.
Los analistas se congratularon de la positiva sorpresa al alza de la economía nacional, no obstante recomiendan cautela ante las condiciones económicas mundiales, especialmente de Estados Unidos.
Se espera que el buen desempeño económico nacional se mantenga para el cierre de año, aunque con niveles más moderados. De cualquier forma se esperan ajustes al alza en las estimaciones para el cierre del tercer trimestre.
El comportamiento de la economía mexicana en las difíciles condiciones internacionales resultó esperanzador, por lo que sería oportuno estimular principalmente la actividad industrial para mantener el desarrollo y seguir con positivas sorpresas como estas.
SUSURROS
Para mantener las buenas noticias, el Bank of America, anticipa que nuestro país podría crecer sus exportaciones hasta en un 30 por ciento gracias a la reubicación de las cadenas de suministro en Norteamérica.
Por su ubicación geográfica es el candidato natural para que las empresas globales y transnacionales reubiquen aquí su producción para a atender las necesidades del amplio mercado estadounidense.
Otro elemento favorable circunstancial es la guerra comercial entre Estados Unidos y China que desalentará las inversiones en el país asiático, mientras se estimularán las destinadas a México.
El conocido como Nearshoring podría ser un factor de crecimiento para México para los próximos 10 años, en consideración también a las ventajas que se ofrecen gracias al T-MEC.